Gimnasia y Tiro cosechó en Mendoza un punto que sabe a mucho. El equipo de Rubén Darío Forestello, con la satisfacción de mantenerse en zona de clasificación, igualó frente a Gimnasia y Esgrima (Mza.), en el estadio Víctor Legrotaglie, cero a cero, por la decimotercera fecha de la Primera Nacional, zona B.
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Gimnasia y Tiro cosechó en Mendoza un punto que sabe a mucho. El equipo de Rubén Darío Forestello, con la satisfacción de mantenerse en zona de clasificación, igualó frente a Gimnasia y Esgrima (Mza.), en el estadio Víctor Legrotaglie, cero a cero, por la decimotercera fecha de la Primera Nacional, zona B.
El albo hizo un gran negocio en tierras mendocinas, teniendo en cuenta como se desarrollo el partido en línea general, ya que le costó en demasía generar juego y pasó varios sobresaltos, los cuales no terminaron en el fondo de la red gracias a la sólida labor de Federico Abadía, arquero millonario.
Gimnasia de Mendoza, con mayor claridad y posesión de pelota, buscó ponerse en ventaja pero le faltó precisión en los últimos metros.
En tanto, los dirigidos por Yagui Forestello, se avocaron más resguardar el cero e intentar lastimar de contra, aunque no dio los resultados esperados, ya que no estuvieron finos de tres cuartos hacia adelante.
En el inicio de la segunda mitad, el albo, sorprendió al local con tiro libre de Agustín Araujo, que terminó descolgado Luis Ojeda, guardavallas del lobo.
Gimnasia, sin salir de su libreto y con algunos variantes en cancha, tuvo una de las más claras en los pies de Tomás Attis (19'), quien de contra superó a dos rivales, llegó muy exigido y no logró definir.
Sobre el final, Abadía, sin lugar a dudas la figura del albo, respondió en un momento clave, cuando luego de varios rebotes debió con las piernas un remate de Alejandro Gutiérrez que tenía destino de red.
Gimnasia y Tiro sufrió por momentos, padeció la falta de juego colectivo, pero cosechó un valioso punto que lo mantiene en zona de clasificación en el torneo.